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miércoles, junio 27, 2007

Se viene el Papelón

Ya no es la misma magia. Esas ganas de ver un partido de Chile, como si fuese un acontecimiento total. Cuando era un buen motivo de reunión, de toda la familia, con su asado de acompañamiento en lo posible. Los delirantes relatos de Pedro Carcuro y las palabras de acompañamiento del señor Livingstone, o en su defecto, las odas al balón del maestro Julio Martínez.

En la pantalla, se veía un nueve y un once fijos. El Matador y Bam Bam. Ese Matador que triunfaba en River Plate y el ex Pichichi se lucía en el Inter de Milán. Confiábamos ciegamente que cada partido que se jugara en nuestro campo de batalla, ese coliseo que emula lo grandioso de un recinto romano, sí, el mismo de avenida Grecia; era una celebración próxima en Plaza Italia. La ilusión de un mundial, tan cercana, y los jugadores, dignos de la generación del final de milenio, demostraban que era posible al igual como lo hiciera el Chino Caszely, o Santibáñez, o Salah entre otros cracks del fútbol chileno de antaño, que el amor a la camiseta existía, y que en ella, las esperanzas y el honor de un país cabían como responsabilidad en los once titanes que tenían como meta introducir un caprichoso balón en el Arco del Triunfo.

Así luego vino ese 2 a 2 contra Italia, 1-1 contra Austria e igual marcador con Camerún con ese mítico gol del Coto Sierra. Yo era alumno de cuarto básico en esos tiempos, y era tanto lo que motivaba ver a la Roja de Todos, que se hacía agradable escuchar la canción de Alberto Plaza y juntar álbumes de láminas con los rostros de las estrellas que brillaron en Francia y que se devolvieron con el solidario 4-1 que les diera el bien finalista Brasil hace ya nueve años.

Pero hoy, ad portas de iniciar la Copa América 2007, en la República Forzadamente Chavista de Venezuela (sería muy bolsero ponerle “Bolivariana”) y también que la Sub 20 nos represente en Canadá; se leen en los diarios mediocres comentarios como los que dijera unos de los Directores Técnicos que ha sacado a varios talentos adelante. No se si extrañamente (recuerden que Esto es Chile) José Sulantay dijo: "Ser campeón del mundo es muy difícil. Si avanzamos, bienvenido sea, pero hay que tener los pies sobre la tierra". Señor Sulantay. ¿Usted lleva a un lote de cabros a jugar a la pelota por que sí? ¿O va con las ganas de alzar la Copa del Mundo? Es muy distinto.

Entonces claro, puede que en Chile el fútbol sea saltar a la cancha a jugar una pichanga para luego echarse polvitos con modelos que se eligen por catálogo. Pues así queda claro. Basta ver a Juan Pablo Úbeda con sus ataos con Pamela Díaz, que es digna señora esposa de un jugador que no pierde la calidad como Manuel Neira; o los más recientes casos como Mauricio Pinilla y Luis Jiménez teniendo en común denominador a la cándida Coté Lopez (...). Me están hablando de fútbol...¿no?.

Está bien. Zamorano también estuvo con modelos. Salas también, y varios otros igual. Pero a los de ahora se les olvida algo. Triunfar, consagrarse, tener un prestigio ganado y conservado con el balón en los pies.

En el caso de la selección que en pocos minutos jugará con Ecuador, en Canal 13 leía, que es un plantel para ilusionarse. ¡Claro, si no niego que los jugadores jueguen bien en sus clubes con campañas extraordinarias!(sólo de algunos), pero el equipo es cuando se logra la sinergia. Chile se destaca por carecerlo. Jugadores poseros, pajeros, faranduleros, taimados e interesados. Yo si estuviera en los pantalones de Carcuro, que gritaba con tanta emoción los goles de Caszely y Zamorano, estaría llorando de vergüenza por una selección que va a la Copa América como un incierto. Menos mal que la Copa América la transmitirá Canal 13, de verdad sería trágico escuchar al menos tres veces la tristeza del colorín. El grupo está nada menos que conformado por Brasil, México y Ecuador. Apostaría que Chile apuesta a lo más, a pasar a segunda ronda, calculadora en mano, y como mejor perdedor.

Entonces, compañeros, con esta selección, sólo podemos pensar en que se viene un gran papelón. Lo siento mucho por el Chupete, el Choro Navia, el Mati, el Mago Valdivia. Talentosos jugadores que tendrán que comerse la vergüenza de figurar en una selección que luego de pasar por la gloria en Francia, se perdió como un carretero ebrio luego de la jarana. O mas bien, muchos siguen en la jarana, arriba de la pelota en vez de saber meterla en el arco.

Me voy a ver el partido. ¡Viva Chile!.

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1 Comments:

  • Bien Claudio. La postura que adoptas está en correcta dirección con respecto a los últimos acontecimientos en relación a nuestra tan amada camiseta. Sólo déjame decirte, que ahora después de ver el partido, la conclusión es obvia para todos: Chile mostró uno de sus mejores partidos del último tiempo, y también mostró algo que no se le veía desde hace mucho tiempo, desde las eliminatorias y el mundial de Francia 98; garra, corazón y amor por la camiseta. Grande Suazo,, incansable Valdivia y salvador Villanueva. Todos obtienen un 7 de parte mia y (también creo) de muchos que agradecemos el sacrificio que mostraron hoy. Por el siguiente rival ahora.

    By Blogger Dan Aránguiz, at 8:53 p. m.  

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